Hoy os traigo una casa llena de arte y cultura pop, de esas por las que siento especial debilidad y que en otras ocasiones os he enseñado, como aquí o aquí.
La casa está en Sydney, es propiedad del fotógrafo Harold David Combs, y en ella vive con sus hijos gemelos de 18 meses. Fue construida en el año 50 y ha sido reformada por su dueño, que se ha esforzado por mantener su esencia a la vez que le daba un toque moderno.
La reforma consistió en agrandar espacios eliminando tabiques, abrir la casa al exterior con una enorme cristalera, quitar la moqueta para dejar a la vista el suelo de madera natural, y pintar las paredes de blanco extrablanco para que las obras de arte y el mobiliario de diseño pudieran brillar por sí mismos.
Los retratos a gran escala hechos por el propio Harold, piezas clásicas maravillosas como el sillón Teddy Bear de Hans J. Wegner junto a otras más contemporáneas como la mesa de centro de Driade, o los azulejos de metro vintage mezclados con muebles de Ikea en la cocina dan un resultado espectacular.
Fotos: Sean Fennessy. Producción: Lucy Feagins. Fuente: The design files.
¿No os parece un lugar increíble y lleno de estímulos para que crezcan niños?
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